EUROPA
PRESS
7 octubre
2019
Un
anticoagulante oral consigue retrasar el Alzheimer en ratones
Investigadores del Centro Nacional de
Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), en colaboración con un equipo de
científicos de la Universidad de Rockefeller de Nueva York (EEUU), han
demostrado que el tratamiento con el fármaco dabigatrán,
un anticoagulante oral de acción directa, es capaz de retrasar la aparición del
Alzheimer en ratones.
En concreto, según los resultados publicados en 'Journal of the American College of Cardiology',
después de un año de tratamiento con dabigatrán, los
animales no experimentaron pérdida de memoria ni disminución en la circulación
cerebral. Asimismo, esta terapia disminuyó la inflamación cerebral, el daño
vascular y redujo los depósitos del péptido amiloide,
signos típicos de la enfermedad Alzheimer.
En los últimos años se ha descubierto que este tipo de
demencia, que afecta a más de 30 millones de personas en el mundo, está
asociada a una disminución en la circulación cerebral, de manera que las
células del cerebro no reciben todos los nutrientes y oxígeno necesarios y
mueren.
Asimismo, se sabe que el Alzheimer es un trastorno
multifactorial con un componente protrombótico
crónico. Ante este escenario, el nuevo estudio ha combinado técnicas
fisiológicas y moleculares para demostrar que la anticoagulación a largo plazo
con este medicamento mejora la patogénesis del Alzheimer en un modelo de ratón
transgénico.
El número de
pacientes con alzheimer se triplicará en 2050
Debido al progresivo envejecimiento de la población, se
estima que el número de personas que padecerán Alzheimer se triplicará en 2050,
puesto que cada tres segundos se produce un nuevo caso en el mundo y,
desafortunadamente, los tratamientos aprobados hasta la fecha solo ayudan
temporalmente con los problemas de memoria, pero no consiguen detener ni
revertir los síntomas.
Dabigatrán, gracias a su "elevada
eficacia y menor número de efectos secundarios" que otros anticoagulantes
clásicos, está aprobado para su uso en diferentes enfermedades humanas.
"Este descubrimiento supone un avance importante para trasladar nuestros
resultados a la práctica clínica y conseguir así un tratamiento eficaz para la
enfermedad de Alzheimer", ha comentado la investigadora Miguel Servet del
CNIC y responsable del estudio, Marta Cortés Canteli.
Asimismo, el director general del CNIC y uno de los autores
principales del trabajo, Valentín Fuster, ha recordado que las enfermedades
neurodegenerativas están profundamente ligadas a la patología de los vasos
cerebrales, por lo que ha aseverado que el estudio del nexo cerebro-corazón en
las enfermedades neurodegenerativas es el "reto de la próxima
década".
A la espera de futuros análisis en humanos, los
investigadores consideran que este estudio sugiere que dabigatrán
podría ser un posible tratamiento futuro para normalizar la circulación
cerebral en enfermos con Alzheimer. "Para llevar a cabo ese tratamiento
individualizado será necesario desarrollar una herramienta diagnóstica que
identifique aquellos pacientes con Alzheimer que presenten tendencia a
coagular. Esa es una de las líneas de investigación en las que nos vamos a
centrar en los próximos años", ha zanjado Cortés Canteli.